La salsa de tomate o ketchup, quizá es el aderezo más conocido a nivel mundial y seguramente pensabas que era el acompañante perfecto para tus papas fritas, pero en realidad si la estás utilizando solamente a la hora de comer, estás desperdiciando todo su potencial.
A continuación te informamos alguno usos que quizás no conocías:
Eliminar malos olores: La combinación de sus ingredientes, vinagre y sal, logran opacar casi cualquier olor molesto que tengas en tu hogar.
Reduce el dolor: Si tienes algún dolor que te esté fastidiando, colócate cubos congelados de kétchup, los cuales duran más tiempo.
Reciclar: Cuando se te acabe el contenido de tu botella, no la tires, consérvala y guarda infinidades de cosas en su interior.
Eliminar la picazón: Todos hemos padecido un molesto piquete de mosquito. Untarte un poco de kétchup en la zona afectada, aliviará la picazón por la combinación del tomate con la sal.
Decoloración de pelo: Si alguna vez padeciste de descoloramiento del tinte que te has aplicado en el pelo, los ácidos de la salsa de kétchup harán que desaparezca esa decoloración.