El domingo 10 de marzo tendrás que adelantar tu reloj una hora, pues tendrás que despedirte del Daylight Saving Time para saludar al horario de verano.
Ya debes estar acostumbrado a cambiar el horario dos veces al año, en el que se adelanta una hora comenzando la primavera y se atrasa una en pleno otoño, todo con el fin de ahorrar energía.
Según una publicación del New York Times, en 1918 el cambio de horario le ahorraba al país más de 2 millones de dólares en gas y más de 1 millón de toneladas de carbón.
La Asociación Internacional de Economía Eléctrica (IAEE), hizo un análisis en el 2017, en el que descubrió que el cambio de horario ayuda ahorrar el 0,34% de energía. Este estudio clarificó que las ciudades que están más cerca a la zona subtropical consumen más energía, pues ciudades como Los ángeles y Houston son de los lugares donde más se registra consumo eléctrico.
Algunas de las recomendaciones para el cambio de horario son:
- Adelantar los relojes
- Programar las luces de la casa
- Revisar tu aire acondicionado
- Cambiar las baterías de los detectores de humo
