Un grupo de científicos del Hospital de Boston, han diseñado una píldora como una opción para las personas que padecen de diabetes.

Esta contiene una cápsula biodegradable que incluye una microaguja que inyectará la insulina en las paredes del estómago.

Como la insulina se disuelve muy fácil al llegar al estómago, los investigadores tuvieron que idear un mecanismo que asegurara que la píldora iba a ser capaz de generar la inyección.

La píldora viene de una forma y tamaño que al ser ingerida permite que la inyección pueda aplicarse correctamente.

Los expertos aseguran que no se presentará ninguna molestia al aplicarse una inyección en las paredes del estómago, ya que esta parte del cuerpo no tiene receptores de dolor.

Por el momento a la píldora se le está haciendo pruebas en cerdos, en los que se han obtenido los resultados esperados sin presentar daños en la pared del estómago.

De ser efectivo su desarrollo, será muy útil para las personas a quienes les resultan molestas las inyecciones.