Las pupilas con forma redonda son las que más estamos acostumbrados a ver, pero las cebras y la mayoría de animales que tienen pezuñas tienen las pupilas rectangulares para ver mejor de manera horizontal.
Esta forma los deja tener una visión de 320 a 340 grados, lo que les permite visualizar lo que pasa a su alrededor sin tener que mover su cabeza, por el contrario los seres humanos vemos en un rango de 160 a 210 grados.
Las cebras tienen la característica de tener corpus nigra, que son unos alargamientos en la parte superior de sus ojos que les sirven como visera para minimizar la entrada de luz y que esta no les genere ceguera.
Además, pueden adaptar su pupila en cualquier posición que tengan su cabeza, lo que les permite mantenerse alertas de los depredadores, aún cuando están pastando.