Un grupo de investigadores del Vall d’Hebrón Institute of Oncology ha desarrollado un fármaco llamado Omomyc, para la cura del cáncer de pulmón y de mama.
Este fármaco ya ha sido probado con éxito en ratones y no tiene efectos secundarios.
Los genes Myc son una familia de protooncogenes compuesta por varios miembros (L-myc, N-myc y c-myc), que se encuentran en las células normales y codifican proteínas del núcleo de la célula que se unen al ADN y facilitan su transcripción, regulando por tanto la actividad de otros genes claves en la metástasis, se encuentran en el núcleo de los tumores. Este fármaco lo que hace es bloquear su paso.
“Se puede administrar por vía intranasal o sanguínea y reduce el grado tumoral impidiendo también su crecimiento –afirma Soucek–. Inhibir Myc es fundamental para atacar las células cancerígenas y Omomyc es la herramienta perfecta”.
Próximamente iniciarán ensayos clínicos con personas y esperan que este fármaco se pueda aplicar también para tratar otros tipos de cáncer.