Los grandes sabios de la historia tienen la creencia que todo lo que nos sucede, lo bueno y lo malo, son situaciones que necesitábamos vivir para aprender algo que no habíamos querido.
El universo es sabio y quiere lo mejor para nosotros, por eso nos expone a situaciones de aprendizaje, donde muchas veces no comprendemos el mensaje que nos quieren dar, por eso te la repite hasta que por fin comprendas la lección.
A continuación, te compartimos unas leyes para que comprendas que nada es casualidad:
Primera Ley: La Persona Que Llega Es La Indicada – Las personas son nuestros espejos donde vemos reflejados nuestros errores. Cada persona que llega a nuestra vida nos deja un mensaje, así como nosotros lo hacemos en ellas.
Segunda Ley: Lo Que Sucede Es Lo Único Que Podía Suceder – Todo lo que nos pasa en nuestra vida, es porque tenía que haber pasado así. Cada experiencia es una enseñanza que debes aprender.
Tercera Ley: Todo Dura Hasta Que Se Acaba – Debes comprender que nada es para siempre, pues todo tiene su inicio y su final. Cuando una persona u objeto cumple su ciclo en tu vida, tiene que irse.