Un anciano de 96 años logró conmover a un juez, quien decidió perdonarle su multa por conducir a exceso de velocidad.
Victor Coella, declaró que se encontraba manejando con prisa porque estaba llevando a su hijo al hospital para que le realizaran un examen de sangre.
“Nunca manejo tan rápido Juez, tengo 96 años y solo manejo cuando lo necesito, llevaba a mi niño a un examen de sangre, lo hago cada dos semanas porque tiene cáncer”, declaró.
El juez conmovido por su historia, decidió omitir su multa y dejarlo ir.
“Escuche, señor, le deseo todo lo mejor. Le deseo lo mejor a su hijo y le deseo buena salud. Su caso es desestimado. Buena suerte y que Dios le bendiga”.