El secador de pelo se ha convertido en una herramienta indispensable para las mujeres, pues es el que les permite secar su cabello y realizarse sus peinados, pero, ¿De dónde surgió está idea?

Alexandre Godefoy, un estilista francés, creó en el año 1890 la primera máquina eléctrica para secar el pelo. Su primer invento fue una aspiradora convencional a la que le quitó el tubo de entrada y añadió un motor para que calentara el viento.

En un principio era un artefacto gran y pesado, por lo que era muy difícil de tener en casa. Fue tan solo hasta inicios del siglo XX, cuando la compañía Racine Universal Motor Company, desarrollaron el secador portátil en forma de pistola que conocemos actualmente.

Los salones de belleza se llenaron de secadores de casco y a gas, aunque estos eran dañinos para el cabello y perjudicaba la salud de las personas, por lo que fue reemplazado por los secadores sombrero, que surgieron a finales de 1950 y aplicaban el aire a través de una especie de gorros de baño adheridos a una manguera.