Dicen que la belleza abre muchas puertas, pero también es muy sabido que los hombres de poder en cualquier ámbito laboral, pueden convertirse en un peligro para las mujeres que desean iniciar en el negocio del entretenimiento, y una de ellas sorprendió con fuertes declaraciones a un famoso medio en México… se trata de la guapísima Maribel Guardia, que, si bien ha vivido de ser un sex symbol, también sufrió al sentirse en peligro por quienes la trataron como un objeto sexual.
Maribel Guardia inició su carrera como modelo en 1978 tras coronarse como Miss Costa Rica. Tras ganar este título, comenzó sus estudios de actuación en México, convirtiéndose, más tarde, en uno de los rostros consentidos de la televisión mexicana. Sin embargo, su ascenso al estrellato no fue fácil, pues tuvo que enfrentarse al asedio sexual.
“Sí hay mucho asedio sexual, a veces ni siquiera era el productor, ni el director, ni mucho menos, sino que desde abajo hasta arriba todo el mundo te quiere seducir”.
Ante la pregunta de cómo le hacía para librarse de todo ese acoso, la también cantante dijo: “Ahora sí que como la canción mexicana (‘Son de la negra’): ‘a todos diles que sí, pero no les digas cuándo’. Es capotear y defenderte”.
La intérprete, de 60 años, también admitió que en sus inicios se sintió forzada a tener una imagen sensual, pues todos querían fotografiarla en bikini. “Siempre que llegaban a entrevistarme, me decían: ‘Queremos hacerte unas fotos, pero tienen que ser en bikini, porque te van a dar portada’. Al principio para mí, eso fue muy difícil. Había salido en un concurso de belleza y recién había pasado todo lo de Acapulco, entonces, era un poco como que me sentía forzada a tener una imagen sensual. Si no, no te iban a entrevistar, no te daban la portada y eso al principio fue como una pelea interna para mí”, agregó.
“Fue una época muy dura, lloraba muchísimo, me sentía muy sola y apenas me estaba adaptando a México. Un día me levanté y dije: ‘Voy a dejar de llorar, estoy en un país precioso, voy a amar a este país y voy a adaptarme’. Era una cosa horrible estar sufriendo”, sentenció.
Hoy como madre y abuela se siente tranquila, trabaja en lo que le gusta y bajo sus condiciones, disfrutando ahora en los shows de su hijo Julián, con quien tiene una gira de jaripeos y palenques.
