En primer lugar, los mosquitos que zumban en nuestros oídos son las hembras, pues son las que necesitan captar proteínas de la sangre para poder incubar sus huevos.

Por esa razón, las hembras poseen una delgada trompa que utilizan para perforar la piel del mamífero y succionar su sangre, lo cual es lo que nos causa la famosa comezón de la picadura de este insecto.

Antes que un mosquito pique a alguien, utiliza sus antenas como receptores para encontrar el calor corporal, la humedad y las emisiones de dióxido de carbono que exhalamos al respirar.

Es por eso que los mosquitos suelen dar vueltas alrededor de nuestra cabeza. El zumbido del mosquito no es otra cosa que el sonido que emiten sus delgadas alas al batirse rápidamente durante el vuelo.