Roberto Tapia, como les habíamos hecho saber, ha sufrido un viacrucis en las últimas semanas tras la hospitalización y cirugía de su madre, quien fue víctima de un infarto cerebral. A través de redes fuimos siendo testigos de su recuperación paulatina que fue lenta pero alentadora, como cuando finalmente pudo articular su primera palabra tras lo sucedido, la historia parece tener un giro afortunado, pues la señora Claudia ya se encuentra en su hogar:

“Después de 45 días con mi madre en el hospital gracias a Dios ya regresó a su casa, tuve la fortuna de poder estar con ella, me había tomado estos días de vacaciones, si no hubiera tenido que cancelar todas mis presentaciones, ya empiezo a trabajar, voy a la Unión Americana, a tener el primer show del año. Mi madre se encuentra ya fuera de peligro, atendida obviamente porque necesita atenciones, el lunes que vuelvo, regreso a ver a mi madrecita, gracias a los doctores, las enfermeras, a los hermanos Rivera, al público por sus oraciones, no me quería ir sabiendo que estaba en el hospital así que “Gracias al de arriba al jefe” porque los milagros sí existen y mi madre es un milagro de mi Dios” fue lo que dijo Roberto en un video muy emotivo.

Por otro lado, el que se ve ¡Mejor que Nunca! es Julio Preciado, tras esa icónica imagen en donde Pancho Barraza lo saca del hospital, “El Gigante de la Banda”, ha publicado una serie de fotografías en donde luce radiante y contento y además consentido por sus equipos deportivos ya que como bien sabemos es un verdadero fan tanto del fútbol como del béisbol, es por ello que las Chivas del Guadalajara, y Los Venados de Mazatlán le enviaron unas casacas firmadas por los jugadores de las respectivas instituciones, un gesto que el cantante compartió con gozo.