Como bien es sabido, fue Yuliana la hija de Julio Preciado quien le donó el riñón que el cantante necesitaba para poder seguir con vida, un verdadero acto de amor que ha conmovido a Julio de una manera rotunda.

Su recuperación va viento en popa, aún se encuentra recluido en una hermética habitación en Guadalajara Jalisco, México, con todas las atenciones, siendo este aislamiento lo que más trabajo le ha costado al cantante. No obstante, dio algunas declaraciones sobre su recuperación y lo que viene después para él y su familia: “Todavía no puedo cantar victoria es una cuestión de los médicos pero yo siento que me recupero a pasos agigantados, mis niveles de glucosa, colesterol, creatinina, todo en orden, los exámenes han salido favorables, y el riñón nuevo ya está trabajando, no fue rechazado por mi cuerpo. Lo que más trabajo me cuesta es el encierro, aunque aquí está mi esposa, y mi médico viene a diario, estoy acostumbrado a mucha gente, a mis amigos, mis nietos, mis compadres, pero trato de cambiarme el chip y listo”.

Por supuesto ha tenido tiempo para pensar en los planes y prioridades: “En cuanto me den el alta quiero irme a Mazatlán, a mi casa, con mi gente, quiero retomar un proyecto en el que había estado trabajando para impulsar nuevos talentos, mi disco con Fato, pero lo más importante ver a toda mi familia, mi gente, los colegas que han estado tan pendientes de mí, y a cuidarme para estar listo para la gira con El Recodo. También he tomado la decisión de que mi herencia sea para mi hija, ella se quedará con mis regalías, será la dueña de mi nombre, todo va a ser para ella, no sólo lo decidí porque me donó la vida sino que no quiero pleitos cuando me muera, ella es la única mujer, mis hijos saben trabajar salir adelante, eso sí le pedí que se case por bienes separados para que no le regale a nadie lo que yo tanto trabajé”.

Por otro lado, dijo también que de algún modo tuvo miedo de deprimirse pues es complicado estar sólo con los médicos, las enfermeras, no sentirse autosuficiente, no poder trabajar, y reconoció que las muestras de cariño en redes sociales fueron la medicina perfecta para que no cayera en depresión y luchara por salir adelante, “No tengo como agradecer las muestras de cariño, las oraciones, ese para mí es el verdadero éxito es lo más gratificante”.