El actor e hijo del gran Ignacio López Tarso, Juan Ignacio Aranda, declaró que su padre se encuentra bien, pero que había pasado recientemente por algunos problemas de salud ocasionados por cuestiones propias de la edad, ya que el primer actor cumplió 95 años de edad el pasado 15 de enero.

De acuerdo a Juan Ignacio, su padre actualmente se está cuidando más, por lo que casi no sale, aunque se mantiene con deseos de integrarse nuevamente al trabajo actoral.

Señaló que debido a su hospitalización se alejó del trabajo, y que aun cuando ya no tiene la capacidad que antes tenía, actualmente está en ciernes una posible participación en el papel estelar de un proyecto, el cual debido al estatus en el que se encuentra, no tiene permitido revelar.

Juan Ignacio señaló que Televisa ya no lo ha convocado a trabajar, pero la empresa de Azcárraga le da una exclusividad, con la que, gracias la disciplina económica que don Ignacio ha guardado, cuenta con los recursos para vivir bien.

De acuerdo a Juan Ignacio, el problema radica en que son cada vez menos los papeles que están pensados para actores de la tercera edad, por lo que hay pocas oportunidades de trabajo, pero confía en que este nuevo proyecto llegue a concretarse, lo cual le daría a don Ignacio López Tarso la ocasión para hacer lo que más ama.