La última vez que Jessica Meir, Andrew Morgan y Oleg Skripochka estuvieron en la Tierra, hubo fiestas en sus casas, happy hours, apretones de manos, conciertos multitudinarios y nadie hablaba aún del coronavirus que ha reformado la vida cotidiana en el mundo.

Más de 200 días después de haberse embarcado en su viaje al espacio, las cosas son diferentes. Los tres astronautas aterrizaron el viernes por la mañana cerca de Dzhezkazgan, Kazajstán.

En una conferencia de prensa, Meir y Morgan dijeron que habían estado siguiendo el desarrollo del virus en la Tierra – pero viendo desde tan lejos, poco parecía diferente en nuestro planeta.

“Podemos ver las noticias aquí arriba, y hemos estado hablando con amigos y familiares para tratar de pintar un cuadro”, dijo Morgan. “Pero desde aquí arriba, es difícil entender lo que ha sucedido y cómo la vida será diferente cuando regresemos”.

El protocolo de la NASA para el regreso de los astronautas a la Tierra incluye un chequeo médico después del aterrizaje, ya que los médicos y otros equipos de la NASA ayudan a los astronautas a aclimatarse a la gravedad de la Tierra y a acostumbrarse a cosas como caminar de nuevo.

Pero con un virus mortal ahora suelto, la NASA dice que los procedimientos posteriores al aterrizaje serán más extensos.