Se ha detectado que el dolor de cabeza intenso o cefalea puede ser un síntoma de alerta de padecer la COVID-19. Pacientes que sufren migraña y saben reconocer este dolor señalan que han tenido picos de especial intensidad, lo que podría indicar que han podido tener coronavirus sin saberlo.
La Dra. Pozo-Rosich del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona, ha explicado en una entrevista que, tener migraña no es un riesgo, pero si se tiene COVID-19 la cefalea se ha relatado como una de las principales señales de alerta.
La doctora ha adelantado un ciclo de webinars (conferencia o taller que se imparte a través de internet) dedicado a los pacientes.
Estos talleres cuentan con el apoyo de la Alianza Europea de Migraña y Dolor de Cabeza (EMHA, en sus siglas en inglés), abierto a unos 250 participantes de toda Europa y Latinoamérica.
En el primer seminario se trató el tema de por qué la cefalea es frecuente en los pacientes con COVID-19, se han dado pautas a los enfermos crónicos de migraña sobre cómo comportarse durante el confinamiento, y también consejos prácticos para minimizar su impacto negativo en la patología.
Se ha indicado que puede ser útil practicar técnicas de relajación, ejercicio físico suave y buscar la interacción social con familiares, amigos y vecinos vía telemática.
La cefalea es una enfermedad considerada crónica y afecta al 2 % de la población, aunque el 50 % de las personas que la padecen no están diagnosticadas.
Adicionalmente, la Dra. Pozo-Rosich ha recomendado acudir al médico si se tiene dolor de cabeza durante más de 15 días al mes y es invalidante para realizar las tareas diarias, ya que es posible que se trate de migraña.