Un nuevo estudio descubrió que el distanciamiento social funcionó para limitar la propagación del coronavirus en los Estados Unidos y puede haber prevenido decenas de millones de infecciones.
El estudio, publicado en la revista Health Affairs, encontró que el distanciamiento social impuesto por el gobierno redujo la tasa de crecimiento diario del virus en alrededor de 9% después de aproximadamente tres semanas.
Sin ninguna medida de distanciamiento social, el número de casos de coronavirus en los EE.UU. podría haber sido 35 veces mayor, según estimaron los investigadores.
“Nuestro trabajo ilustra el peligro potencial de una propagación exponencial en ausencia de intervenciones, proporcionando información relevante para las estrategias de reinicio de la actividad económica”, escribieron.
Charles Courtemanche, de la Universidad de Kentucky -así como sus colegas de allí y de la Universidad de Louisville y de la Universidad Estatal de Georgia- estimaron los efectos del distanciamiento social comparando los casos de coronavirus en los condados con y sin una serie de medidas de distanciamiento social.
Los investigadores hallaron que los pedidos de refugio en el lugar y el cierre de restaurantes y bares parecían ser particularmente eficaces para frenar la propagación del virus. Las prohibiciones de grandes eventos y el cierre de escuelas públicas por sí solos no parecían afectar la tasa de crecimiento.
