Tras el llamamiento del presidente Trump para la reapertura de iglesias y lugares de culto, la Dra. Deborah Birx, funcionaria del grupo de trabajo de coronavirus de la Casa Blanca, ofreció consejos a los líderes religiosos.

“Creo que cada uno de los líderes de la comunidad religiosa debería estar en contacto con sus departamentos de salud locales para que puedan comunicarse con sus feligreses”, dijo Birx. “Ciertamente, las personas que tienen co-morbilidades significativas, queremos que estén protegidas. Sé que esas casas de culto quieren protegerlas”.

Birx añadió que los líderes religiosos que encuentran un alto número de casos de Covid-19 en sus comunidades, pueden querer “esperar otra semana” antes de reabrir.

Instó a los feligreses a seguir las directrices de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades sobre el distanciamiento social.

“Lo que estamos tratando de decir con la guía de los CDC es que hay una manera de trabajar juntos para tener un distanciamiento social y seguridad para la gente, de manera que disminuyamos la cantidad de exposición que alguien tendría a un asintomático – y lo digo así porque sé que todos ustedes y todos los estadounidenses, si no se sintieran bien, no irían a la iglesia ese día”.