Ver la lucha política del coronavirus puede dejarnos con la creencia de que hay esencialmente dos campos: el primero que quiere que la economía se abra a casi cualquier costo, y el segundo que quiere que los negocios no esenciales permanezcan cerrados.

Aquellos que están entrando a raudales en las capitales de los estados, exigiendo reaperturas, no hablan para nada cercano a la mayoría. Sin embargo, una mirada más cercana a los datos revela que hay un punto medio dispuestos a abrir algunos negocios.

Veamos la más reciente encuesta de la Universidad de Quinnipiac:

• La gran mayoría (75%) de los votantes están a favor de una re-apertura más lenta de la economía, si la reapertura rápida significa empeorar la propagación del coronavirus.
• Un 74% piensa que es inseguro subirse a un avión.
• El 81% dicen que es poco probable que asistan a un evento deportivo en los próximos tres meses.
• Un considerable 68% piensa que es improbable que se queden en un hotel o en un alquiler de vacaciones.