Una zona céntrica de Seattle fue tomada por manifestantes que protestaban por la muerte de George Floyd y luego de continuas batallas, los uniformados fueron retirados por orden de las autoridades locales.
Esto desató la furia de presidente Trump quien dijo: “Terroristas han tomado Seattle, liderados por los demócratas de izquierda radical, por supuesto. ¡Ley y orden!”.
Trump invitó al Gobernador de Washington y a la alcaldesa de Seattle a que retomaran el control de la zona.
“Si no lo hacen, lo haré yo. Esto no es un juego. Hay que parar a esos feos anarquistas de inmediato”, escribió Trump.
La alcaldesa de Seattle Jenny Durkan le respondió: “Haz que todos estemos seguros. Regresa a tu búnker“.
Según reportes de prensa local, el área se había convertido en un campo de batalla entre policías y manifestantes, con excesos de ambas partes. Fue entonces cuándo la alcaldesa ordenó la retirada de la policía.
Según The New York Times, en un muro de la zona hay escritas tres de sus exigencias:
• Quitar el financiamiento a la Policía
• Dar financiamiento para programas de salud comunitaria
• Retirar todos los cargos contra los manifestantes.
El problema es que en internet la lista aumentó hasta 30 peticiones.
Trump amenazó con enviar al Ejército y esta intervención sería posible invocando la Ley de Insurrección, que establece en cuáles circunstancias el gobierno en Washington DC puede actuar sin autorización de las autoridades estadales.
