Los funcionarios de la Unión Europea se apresuran a acordar quién puede visitar el bloque a partir del 1 de julio, basándose en la evolución de los países de origen con los nuevos casos de coronavirus. Los estadounidenses, hasta ahora, están excluidos, según las listas preliminares vistas por The New York Times.

Los países de la Unión Europea que se apresuran a reactivar sus economías y a reabrir sus fronteras después de meses de restricciones por coronavirus están dispuestos a bloquear la entrada de los estadounidenses porque los Estados Unidos no han logrado controlar el flagelo, según el borrador de las listas de viajeros aceptables que ha visto el New York Times.

Esa perspectiva, que agruparía a los visitantes estadounidenses con los rusos y los brasileños como no deseados, es un duro golpe para el prestigio de los Estados Unidos en el mundo y un repudio al manejo del virus por parte del Presidente Trump en los Estados Unidos, que tiene más de 2,3 millones de casos y más de 120,000 muertes, más que cualquier otro país.

Las naciones europeas están regateando actualmente dos posibles listas de visitantes aceptables basadas en cómo les va a los países con la pandemia del coronavirus. Ambas listas incluyen a China, así como a países en desarrollo como Uganda, Cuba y Vietnam. Ambas también excluyen a los Estados Unidos y otros países que se consideraron demasiado arriesgados debido a la propagación del virus.

Los viajeros de los Estados Unidos y del resto del mundo ya habían sido excluidos de visitar la Unión Europea -con pocas excepciones, principalmente para repatriaciones o “viajes esenciales”- desde mediados de marzo. Pero se espera una decisión final sobre la reapertura de las fronteras a principios de la próxima semana, antes de que el bloque se reabra el 1 de julio.