Semanas después de que la mayoría de los estados comenzaran a levantar sus cierres, algunas partes del país están tomando medidas para renovar las restricciones con la esperanza de frenar el aumento de nuevos casos.
Con el 4 de julio acercándose, los funcionarios están tratando de no repetir escenas del Día de Memorial, cuando miles de personas en todo el país acudieron a playas, bares y fiestas mientras los expertos advirtieron que las multitudes podrían llevar a picos en los casos en el camino. Al menos 12 estados han hecho una pausa en sus planes de reapertura, con la esperanza de contener la propagación.
Algunos lugares ordenaron a sus bares que cerraran de nuevo, mientras que las playas de Miami, Fort Lauderdale y Palm Beach fueron prohibidas al público durante el próximo fin de semana festivo.
Los anuncios vienen después de una semana devastadora para el país, durante la cual muchos estados reportaron los picos más altos en un solo día y los EE.UU. también registraron su mayor aumento de casos en un solo día, con 40,173 casos reportados el viernes.
Pero esos números pueden ser sólo un vistazo a lo extendidas que están las infecciones en todo el país, ya que una encuesta de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades encontró que el número total de infecciones podría ser hasta 24 veces más alto que lo reportado.
No está claro lo que sucederá a continuación. Los líderes locales y estatales han prometido que harán lo que sea necesario para evitar un segundo encierro.