Un enorme aumento de los gastos y una fuerte caída de los ingresos condujeron a la gran brecha. El déficit en los últimos nueve meses ha superado los 2.7 billones de dólares.
El déficit presupuestario de los Estados Unidos se amplió a un récord de 864,000 millones de dólares el mes pasado debido a la extraordinaria respuesta del gobierno federal a la pandemia del coronavirus, dijo el Departamento del Tesoro.
En junio de 2019, el déficit presupuestario era de sólo 8,000 millones de dólares.
El gasto federal se elevó a más de 1.1 billones de dólares en junio, más del doble de lo que el gobierno de EE.UU. gasta en un mes típico. La cantidad de ingresos fiscales recaudados por el gobierno federal se mantuvo en gran medida estable, en unos 240,000 millones de dólares, en parte debido a que el Departamento del Tesoro retrasó la fecha límite de presentación de impuestos hasta julio.
El enorme aumento en junio empujó el déficit presupuestario para los primeros nueve meses del año fiscal a 2.7 billones de dólares.
Las cifras del déficit de junio destacan los estragos que la pandemia del coronavirus ha causado en el presupuesto de los Estados Unidos. En años anteriores, el déficit federal se consideraba grande cuando se acercaba o eclipsaba 1 trillón de dólares para todo un año. Los Estados Unidos gastaron cerca de 2 billones de dólares más de lo que recibieron a través de los ingresos fiscales sólo de abril a junio.
El Congreso aprobó en marzo 2 billones de dólares en gastos que tardaron varios meses en entrar en vigor cuando la economía se contrajo a causa de la pandemia. Esos esfuerzos incluyeron mayores beneficios para los estadounidenses desempleados, pago del estímulo de $1,200 y alivio para las pequeñas empresas. Los economistas dicen que los fondos eran muy necesarios para evitar que decenas de millones de estadounidenses se vieran afectados por la pandemia y que aún se necesitan más.
