Nueva Zelanda dijo que no usar una máscara en el transporte público sería un delito punible.

Los infractores serán castigados con una notificación de infracción de 300 dólares neozelandeses (198 dólares) o una multa de hasta 1,000 dólares neozelandeses (658 dólares) impuesta por los tribunales, anunció el Ministro de Salud del país, Chris Hipkins, en un comunicado.

Dijo que las máscaras serán obligatorias en el transporte público y en los aviones a partir del lunes, pero que los taxis y los autobuses escolares están excluidos de la norma.

El ministro añadió que las personas con una discapacidad o una condición física o mental que hace que las máscaras no sean adecuadas estarán exentas, junto con los niños menores de 12 años.

Hipkins señaló que el uso de máscaras no es parte de la cultura de Nueva Zelanda, pero dijo: “Lo que pedimos es que la gente use una cubierta para la cara como si se abrochara el cinturón de seguridad al subir a un auto”.