Ante el preocupante aumento de casos de coronavirus en algunos barrios judíos ortodoxos, los funcionarios de salud de la ciudad de Nueva York realizaron inspecciones de emergencia en escuelas religiosas privadas. La policía también intensificó la aplicación de las directrices de salud pública en varios barrios judíos ortodoxos de Queens y Brooklyn, donde los residentes a menudo no usan máscaras o siguen las directrices de distanciamiento social.

El Departamento de Salud dijo que si el lunes no se han producido avances significativos en el cumplimiento de las directrices -que es el Yom Kippur, el día más sagrado del calendario judío- podrán imponer multas, limitar las reuniones o forzar el cierre de negocios o escuelas. Cuatro yeshivas ya han sido cerradas debido a violaciones de las reglas de distanciamiento social.

Los funcionarios advirtieron del aumento de casos en algunos barrios judíos ortodoxos, donde los índices de positividad en las pruebas son del 3 al 6 por ciento, significativamente más que el índice general de la ciudad del 1 al 2 por ciento. Si los casos continúan aumentando, podrían amenazar el cierre de la ciudad, incluyendo la apertura de escuelas públicas este mes, que se cerrarán automáticamente si los índices de positividad de la ciudad alcanzan el 3 por ciento.

“Este puede ser el momento más precario al que nos enfrentamos desde que salimos del encierro”, dijo el Dr. Dave Chokshi, el comisionado de salud de la ciudad.