La gente tendrá que usar máscaras hasta que las vacunas estén disponibles, lo que significa que al menos hasta el año que viene, el Dr. Anthony Fauci y dos altos funcionarios del Departamento de Slaud.

Las personas que se quitan las máscaras para hablar en público no lo entienden, según escribió el Dr. Andrea Lerner, asociado clínico del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas, junto con el jefe de personal de Fauci, Greg Folkers, en un artículo en el Journal of the American Medical Association.

Hablaron en defensa de las máscaras de tela, recientemente atacadas por el senador Rand Paul, y dijeron que hacer pruebas regularmente no es suficiente para absolver a la gente de la necesidad de usar una máscara.

Las máscaras bloquean las grandes partículas que salen de la boca y la nariz de las personas.

“Sin embargo, informes recientes indican que los aerosoles que permanecen en el aire a distancias o tiempos más largos también han estado involucrados en la transmisión del SARS-CoV-2 en ciertas circunstancias, a menudo en espacios cerrados mal ventilados y asociados con comportamientos como cantar, gritar o respirar fuertemente durante el ejercicio”, escribió Lerner, Folkers y Fauci.

“Los experimentos de dispersión de la luz indican que un minuto de hablar en voz alta puede generar potencialmente más de 1,000 aerosoles que contienen partículas que pueden permanecer en el aire en un ambiente cerrado y estancado”, añadieron.

“Por lo tanto, la práctica comúnmente observada de los individuos de quitarse la máscara al hablar no es aconsejable”.

Y con la llegada del invierno, la gente tendrá que usar máscaras aún más, sentenciaron.

“Evidencias recientes sugieren que hasta el 40% al 45% de las personas infectadas con SARS-CoV-2 pueden no ser nunca sintomáticas, pero aun así pueden transmitir el virus”, añadieron. “La propagación viral de personas sin síntomas puede ser la causa de más del 50% de los eventos de transmisión en el brote de COVID-19”.

Las pruebas pueden ayudar, pero no son suficientes para probar que alguien está libre de la infección. “Ninguna prueba es perfecta; todas tienen un límite inferior de detección de material viral y el potencial de falsos negativos. Además, el resultado de una prueba representa sólo un punto en el tiempo y no indica el estado de un individuo fuera del momento en que se recogió la muestra”, señalaron.

Y las máscaras de tela pueden funcionar muy bien. “Las máscaras quirúrgicas pueden reducir la propagación de virus respiratorios en el aliento exhalado, y la eficacia de filtrado de algunos materiales utilizados en las máscaras de tela puede acercarse a la de las máscaras quirúrgicas”, manifestaron.