Hay tantas razones por las que millones de personas quieren derrotar a Donald Trump en estas elecciones. Y ahora el ex presidente Barack Obama, que volvió a la campaña la semana pasada para apoyar a su ex vicepresidente Joe Biden y a su compañera de fórmula Kamala Harris, ha servido una más.

En sus discursos, Obama destacó una serie de cuestiones por las que se debe descartar a Trump, incluyendo la respuesta incompetente de Trump a la pandemia mortal y las preguntas sobre su imperio empresarial.

Pero el momento que resonó profundamente fue cuando el ex presidente le dijo a la multitud que con Biden en la Casa Blanca, “No será tan agotador”. Con Biden y Harris al timón, dijo Obama, “no vas a tener que pensar en las locuras que dijeron todos los días”.

Aunque ninguno necesita ejemplos de la escandalosa conducta de Trump, Obama señaló algunos para la audiencia: “Podrán seguir con sus vidas, sabiendo que el Presidente no va a sugerir inyectarse lejía, o volver a twittear teorías sobre conspiraciones secretas que dirigen el mundo. O retwitear, que los SEALS de la Marina no mataron a Bin Laden.”

(Hace unas semanas Trump volvió a twittear una teoría de conspiración sin fundamento de que los SEALs de la Marina no mataron a Bin Laden, sino que mataron a un doble, lo que llevó a uno de los SEALs de la Marina en esa famosa misión a twittear a Trump, “Hombres muy valientes dijeron adiós a sus hijos para ir a matar a Osama Bin Laden… No fue a un doble”.)

Obama tiene razón. Las payasadas diarias de Trump son agotadoras. Pasamos de “No Drama Obama” a “Drama King Donald”. No estoy seguro, pero Trump nos está envejeciendo. ¡Los cuatro años de su presidencia probablemente nos han quitado ocho años de vida!