La autoestima se forma a lo largo de la vida de una persona y puede variar de acuerdo con las experiencias vividas o el momento vital. La cultura y la educación pesan mucho en la autoconfianza y la autovaloración, y también todo lo que va ocurriendo a medida que pasan los años.
Cuando una persona tiene baja autoestima, se afecta negativamente en muchos aspectos de su vida, ya que esta es el pilar sobre el que se sostiene la psicología de una persona. Una baja autoestima facilita la aparición de trastornos y problemas psicológicos.
Las características de las personas con baja autoestima son:
- Son indecisos
- Tienen miedo exagerado a equivocarse
- No valoran o minimizan sus talentos
- Piensan que no son capaces y que no lo van a conseguir
- Sienten miedo a las situaciones nuevas
- Evitan los riesgos
- Son ansioso y nerviosos, por lo que evitan situaciones que le causan angustia y temor
- No toman la iniciativa
- Son tímidos, aislados y tienen pocos amigos
- Son pesimistas
- Sienten que no tienen control sobre su vida
- No se esfuerzan porque no creen en su capacidad
- Se creen personas poco interesantes