Las fuerzas armadas francesas tienen ahora permiso para desarrollar “soldados aumentados” tras un informe de un comité de ética militar.

El informe permite tratamientos médicos, prótesis e implantes que mejoren “las capacidades físicas, cognitivas, perceptivas y psicológicas”, y podría permitir el seguimiento de la localización o la conectividad con los sistemas de armas y otros soldados.

Otras posibles intervenciones consideradas por el comité de ética de las fuerzas armadas incluyen tratamientos médicos para prevenir el dolor, el estrés y la fatiga, y sustancias que mejorarían la resistencia mental si un soldado fuera hecho prisionero.

El comité dijo que Francia necesita mantener “la superioridad operacional de sus fuerzas armadas en un contexto estratégico difícil”, respetando al mismo tiempo las normas que rigen el ejército, el derecho humanitario y los “valores fundamentales de nuestra sociedad”.