Existen olores muy particulares que agradan a muchas personas, por ejemplo, el olor de los libros viejos. ¿Por qué?
Según una investigación realizada por científicos del University College de Londres, en la que emplearon la técnica de “análisis de espacio” para saber cuáles eran los compuestos volátiles que se desprenden de los libros a medida que se descomponen, encontró que, de los 4 elementos que desprenden, como son: colofonia, ácido acético, furfural y lignina, solamente la lignina es la que provoca el gusto por el olor a libro viejo.
Según Luca Turin, crítico de perfumes, la lignina es un polímero que evita que los árboles se caigan. Es una sustancia relacionada con la molécula de la vainillina, lo que produce su rico aroma.
A medida que pasa el tiempo, y los libros envejecen, las moléculas de lignina que están en las hojas del libro empiezan a fragmentarse y a producir ese olor característico que recuerda ligeramente al de la vainilla.
Algunas compañías del área de la cosmética han sacado perfumes y ambientadores con olor a libro viejo.
Este es el secreto del gusto por el olor de los libros viejos.