El consumo de café vuelve a ser un éxito, siempre que sea negro y con cafeína.

Beber una o más tazas de café solo al día se asoció con una reducción del riesgo de insuficiencia cardíaca a largo plazo, según una revisión de los datos de la dieta de tres grandes estudios que utilizaron herramientas analíticas de la Asociación Americana del Corazón.

El beneficio no se extendió al café descafeinado. En cambio, el análisis encontró una asociación entre el café descafeinado y un mayor riesgo de insuficiencia cardíaca.

La insuficiencia cardíaca se produce cuando un corazón debilitado no consigue suministrar a las células del cuerpo la sangre suficiente para obtener el oxígeno necesario para que el organismo funcione correctamente. Las personas con insuficiencia cardíaca sufren fatiga y falta de aliento y tienen problemas para caminar, subir escaleras u otras actividades cotidianas.