El cierre por la pandemia ha modificado radicalmente la economía estadounidense, devastando a los que ya tenían dificultades. Pero para el 50% de la población, aproximadamente, que constituye la clase media -definida por el Pew Research Center como aquella que tiene unos ingresos que oscilan entre los 45,000 y los 135,000 dólares para un hogar de tres personas-, las consecuencias han sido más desiguales.
Hay millones que estaban en una situación financiera relativamente igualitaria antes de marzo pasado -personas que no habrían pensado en repartirse la cuenta en una noche de fiesta- y que ahora se encuentran en trayectorias enormemente diferentes”, escribió Nelson Schwartz, que cubre la economía. “Como un tornado, la pandemia puede devastar un hogar y dejar indemnes a los vecinos”.