El exmandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva lanzó un mordaz ataque contra la gestión del presidente Jair Bolsonaro en el caso Covid-19, días después de que un juez despejara el camino para su regreso político.

El ex presidente, más conocido como Lula, no confirmó ni desmintió las encendidas especulaciones de que ahora podría desafiar a Bolsonaro en la carrera presidencial de 2022 como candidato del izquierdista Partido de los Trabajadores, y sólo dijo que era “demasiado pronto” para entrar en esa discusión.

“Cuando llegue 2022, el partido discutirá si tenemos un candidato o si actuamos en un frente amplio”, dijo.

“Mi cabeza no tiene tiempo para pensar en una candidatura en 2022”, añadió. “Tenemos mucho que hacer antes de hablar de nosotros mismos”.

Da Silva había sido condenado por corrupción y lavado de dinero en 2017 derivado de una amplia investigación sobre la petrolera estatal Petrobras, apodada “Operación Lavado de Autos”. Esas condenas fueron anuladas el lunes por el juez del Supremo Tribunal Federal de Brasil Luiz Edson Fachin, restaurando efectivamente su derecho a presentarse a las elecciones.