Casi el 60% de la población israelí ha recibido al menos una dosis de la vacuna contra el coronavirus. El número de casos graves ha disminuido. Durante el fin de semana, el país levantó muchas de las restricciones por el virus que habían estado vigentes durante meses.
Para salir del bloqueo, Israel se basa en un sistema de Pasaporte Verde que permite a las personas vacunadas volver a entrar en los espacios públicos.
¿Cómo ha cambiado la vida cotidiana desde la puesta en marcha?
El país ha abierto el programa de vacunas a todos los mayores de 16 años, y realmente hay una gran sensación de alivio. A los israelíes les encanta sentarse en los cafés y salir a comer -es realmente un pasatiempo nacional- y han estado cerrados durante gran parte del último año. Ahora, desde el domingo, han reabierto los cafés y restaurantes.
¿Cómo ha cambiado la vida?
A nivel personal, estamos volviendo a ver a los amigos y a la familia de una forma mucho más relajada. Sigue siendo obligatorio llevar máscaras cuando se sale a la calle, pero la conciencia es diferente. Hace poco en el supermercado me di cuenta de que la gente me miraba de forma extraña y entonces me di cuenta de que me había olvidado de ponerme la máscara.