Después de casi una semana de dragado y tirones -y con algo de ayuda de la luna-, los equipos de salvamento liberaron ayer el gigantesco portacontenedores que se había quedado atascado en el Canal de Suez, una de las vías marítimas más importantes del mundo.
Como resultado, el tráfico se ha reanudado para los cientos de barcos que esperan en ambos extremos del canal. Y aunque las estimaciones han variado mucho, el retraso también es costoso. “La interrupción ha causado a las autoridades del canal en Egipto pérdidas de 95 millones de dólares en ingresos”, dijo Peter Goodman.
Y aunque el barco esté libre, el trastorno no ha terminado.
“No es como apretar un interruptor”, dijo Vivian Yee, jefa de la oficina del Times en El Cairo. Ahora que el barco está libre, el retraso tardará al menos unos días, quizá incluso semanas, en resolverse”.
¿Qué ha pasado?
Los fuertes vientos de una tormenta de arena provocaron que el barco, el Ever Given, se desviara del canal y quedara atascado, según sus operadores. Pero los expertos en transporte marítimo han sugerido que, aunque el viento probablemente haya tenido un papel en la crisis, el error humano también podría haberlo tenido.
El año pasado, casi 19.000 barcos viajaron por el canal sin ningún accidente, según el jefe de la Autoridad del Canal de Suez, la agencia egipcia que opera la vía acuática. Y los vientos fuertes no son inusuales en la zona. “Hemos visto vientos peores”, dijo Ahmad al-Sayed, un guardia de seguridad, “pero nunca había ocurrido nada parecido”.
Los equipos que trabajan para desenterrar el barco dependían en gran medida de fuerzas que escapaban a su control: la luna y las mareas. La luna llena del domingo ofreció unos centímetros más de flujo de marea y dio a los trabajadores el impulso que necesitaban para liberar el barco.
No es un barco normal
No es habitual que un accidente marítimo sea noticia internacional. Pero éste no fue un percance normal. En primer lugar, el Canal de Suez no es como otras vías navegables. “Es un canal vital que une las fábricas de Asia con los clientes ricos de Europa, así como un importante conducto para el petróleo”, escribe Peter.
Y el Ever Given es uno de los mayores portacontenedores del mundo. “Desde la distancia, es difícil comprender lo grande que es”, dice Vivian.