Cuando llega a casa un hermanito menor, tu hijo mayor puede sentir muchas emociones que van desde la inmensa felicidad por tener un compañero de juegos hasta sentir muchos celos por el recién llegado.
Los niños que están en edades entre 1 y 3 años, que aún no pueden verbalizar sus sentimientos, pueden empezar a tener conductas regresivas como chuparse el dedo, querer usar biberón o pañal, y hablar como un bebé.
Los hermanos mayores que ya pasan de los 3 años, pueden expresar sus sentimientos portándose mal, haciendo berrinches o negándose a comer, todo con la finalidad de poner a prueba la paciencia de sus padres.
Generalmente estos problemas son transitorios, y se puede ayudar al hermano mayor a adaptarse a la idea de tener un hermanito.
Te recomendamos:
• Hablarle sobre la importancia del papel de hermano mayor.
• Involucre a su hijo mayor en la escogencia de los artículos para su hermanito.
• Consiga un regalo que el hermano mayor le quiera dar al bebé, como acto de bienvenida.
• También es buena idea comprar un regalo para el hijo mayor, de parte del hermanito menor.
• Reserve tiempo y espacio para compartir exclusivamente con su hijo mayor.
• Leer cuentos e historias sobre la familia que le ayuden a entender la nueva situación.