Usar tacones hace que te veas más elegante y estilizada, pero, desafortunadamente estos no solo son incómodos para caminar sino también para conducir.
Y, aunque millones de mujeres están acostumbradas a conducir con tacones, deben saber que se pone en peligro su vida y la de los demás pasajeros.
¿Por qué?
Este tipo de calzado no tiene la superficie necesaria en la suela para permitir pisar el pedal o el freno en caso que se deba hacer de manera inmediata para evitar un accidente.
Cuando se presenta una emergencia, los reflejos son la única salvación y ahí los tacones no permiten que nuestros pies actúen adecuadamente para pisar el freno o el acelerador.
Un zapato de tacón solo permite un movimiento limitado hacia enfrente o hacia atrás, impidiendo pisar el freno hasta el fondo. Así, se aumenta el riesgo de sufrir un accidente o no poder evitarlo, porque no hay las condiciones de movilidad al 100 %.
RECOMENDACIÓN: Cargar otro par de zapatos, ya sean flats o tenis, para usarlos mientras manejas y ponerte nuevamente tus tacones cuando bajes del auto.