Yonaguni es una pequeña isla que se convirtió en protagonista de la canción de Bad Bunny por sus curiosos hallazgos. Lo más llamativo de este lugar es un megalito sumergido en el mar, descubierto en 1986 por un explorador japonés llamado Kihachirō Aratake.
En el yacimiento se encontraron estructuras con escalones, que pueden haberse formado en la superficie antes del descubrimiento. Circulan varias leyendas sobre la isla debido a su perfección.
Un estudio publicado por la Universidad de Ryūkyū popularizó otra teoría. Se cree que las estructuras de Yonaguni fueron alteradas por los humanos y se hundieron en el mar como una especie de “Atlántida”.
A pesar de las especulaciones, lo que realmente ocurrió con las “escaleras bajo el mar” sigue siendo un misterio. No se sabe con certeza si fueron una formación de la naturaleza o creadas por el hombre.
Otro mito asociado a Yonaguni es el de la “Isla de las Mujeres”. Se dice que allí sólo nacían mujeres en una comunidad, similar a las “amazonas” de la tradición griega.