Cinco meses después de su detención por el FBI en un aeropuerto de Washington, Emma Coronel Aispuro, conocida mundialmente como la esposa de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, se prepara para enfrentarse a un juez federal. Allí, la madre de gemelos, de 31 años, estará dispuesta a declararse culpable de haber ayudado al narcotraficante a construir su imperio multimillonario y de haberle ayudado a escapar de la cárcel.
Según la fuente, los fiscales en el juicio del Chapo han presentado pruebas clave de que la ex reina de belleza nacida en California “estaba profundamente involucrada en sus actividades criminales y a menudo le ayudaba a enviar mensajes a su propio padre, Inés Coronel Barreras, que era uno de sus principales lugartenientes”.
Emma Coronel en un dibujo facilitado por el tribunal mientras comparece ante la jueza Robin Coronel adquirió notoriedad mundial cuando rezó por su marido en una entrevista con Telemundo cuando fue detenido y llevado a una prisión de máxima seguridad en Nueva York. En otras ocasiones, a través de sus abogados, abogó por el bienestar de su marido y criticó las condiciones en las que estaba recluido.
Pero una investigación de casi dos años llevada a cabo en Estados Unidos mientras se celebraba el juicio de Guzmán Loera en Brooklyn, Nueva York, indagó en los supuestos vínculos entre ella y El Chapo. En concreto, se la acusa de ayudarle en su fuga del penal del Altiplano, cerca de Toluca (México), en 2015.
El 13 de febrero de 2019, Joaquín el Chapo Guzmán Loera fue declarado culpable de narcotráfico por un jurado de 12 miembros en la corte federal de Brooklyn, Nueva York. Actualmente cumple una condena de cadena perpetua en la prisión ADX, más conocida como “Supermax”, en Florence, Colorado.