Después de años de pérdida de popularidad, Victoria’s Secret, el gigante de la lencería conocido por su imagen super sexual, se está sometiendo a un importante cambio de imagen.
Uno de los principales cambios es que ya no hay ángeles, las supermodelos con poca ropa como Heidi Klum y Tyra Banks que posaban en exclusiva para la empresa. En su lugar está “el Colectivo VS”, siete mujeres que asesorarán y promocionarán la marca, entre ellas la estrella del fútbol Megan Rapinoe y la actriz Priyanka Chopra Jonas.
En la última década, ha surgido “la anti-Victoria’s Secrets”, como escribió Rory Satran en The Wall Street Journal. Competidores como ThirdLove y Cuup priorizan “la comodidad, así como la sensualidad y la estructura, el tallaje inclusivo y las imágenes publicitarias no objetivas con un grupo diverso de modelos”.
Victoria’s Secret ha tardado en adaptarse. “Teníamos que dejar de ser lo que quieren los hombres y ser lo que quieren las mujeres”, dijo Martin Waters, director general de la marca. En las tiendas, los maniquíes tendrán ahora una amplia gama de formas y tamaños. La empresa también empezará a ofrecer productos como sujetadores de lactancia y ropa deportiva.