El gobierno chino acusó a Estados Unidos de interferir en sus asuntos internos después de que Washington enviara 2.5 millones de dosis de la vacuna Covid-19 de Moderna a Taiwán, afirmando que cualquier forma de ayuda en materia de vacunas no debe utilizarse como una forma de “manipulación política”.

China considera a Taiwán como su propio territorio y es muy sensible a cualquier forma de interacción entre Estados Unidos y la democracia autogobernada. Las donaciones, que triplican con creces la cantidad original que había prometido la administración Biden, fueron celebradas en Taiwán.

En Pekín, Zhao Lijian, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, criticó la medida.

“Instamos a Estados Unidos a que no utilice la ayuda en materia de vacunas para realizar una manipulación política y a que no interfiera en los asuntos internos de China”, dijo el Sr. Zhao en una sesión informativa periódica.

Las donaciones de vacunas se producen en un momento en el que las tensiones entre Estados Unidos y China son elevadas en relación con Taiwán. Los funcionarios chinos se molestaron este mes cuando tres senadores estadounidenses visitaron la isla para anunciar el compromiso original de 750,000 dosis.