La obesidad infantil ha aumentado significativamente en Estados Unidos durante las últimas cuatro décadas. En 1980, alrededor del 5 por ciento de los niños del país de entre 2 y 19 años padecían obesidad, según el C.D.C.; en 2018, más del 19 por ciento la padecía, y un 16 por ciento adicional se consideraba con sobrepeso. Debido a que los niños son mucho más propensos a ganar una cantidad poco saludable de peso mientras están fuera de la escuela durante el verano, los expertos estaban preocupados la primavera pasada cuando la escuela presencial se suspendió indefinidamente debido a la pandemia.
Según un estudio publicado en mayo en la revista Pediatrics, estas preocupaciones estaban justificadas. Basándose en las mediciones del índice de masa corporal realizadas a más de 500,000 niños de entre 2 y 17 años durante las visitas a la Red de Atención del Hospital Infantil de Filadelfia, los investigadores descubrieron que, en promedio, entre enero de 2019 y diciembre de 2020 la prevalencia de la obesidad aumentó en casi 2 puntos porcentuales en general, del 13.7 al 15.4 por ciento.
Estos aumentos en las primeras etapas de la vida hacen más probable que los niños tengan un mayor índice de masa corporal cuando crezcan.