La fiscalía general ha abierto una investigación sobre el papel de Bolsonaro en una trama de corrupción en la que funcionarios del Ministerio de Salud solicitaron sobornos a los distribuidores de vacunas. La indignación atrajo a decenas de miles de brasileños a las calles en varias ciudades el sábado, la tercera gran ola de manifestaciones en las últimas semanas.

Es probable que la investigación suponga una gran amenaza para la candidatura de Bolsonaro a la reelección el año que viene, y quizás incluso para su capacidad de cumplir el resto de su mandato.