Es uno de los lugares más húmedos del planeta, pero los cambios en las precipitaciones, las hierbas invasoras y la escasez de viviendas están provocando un aumento de los incendios forestales en las islas.
Las llamas se extendieron primero por campos resecos de hierba de guinea. Luego las llamas se acercaron tanto a la casa de Emma-Lei Gerrish que ésta temió por su vida.
“Estaba aterrorizada de que fuera a pasar del barranco”, dijo Gerrish, de 26 años, cuya familia cría vacas y ovejas en las colinas de Pa’auilo, un puesto ganadero de la Isla Grande de Hawai. “Nunca he visto un incendio tan grande en mi vida”.
Para cuando los bomberos lograron controlar el incendio forestal el mes pasado -con una mezcla de helicópteros que lanzaron agua mientras los residentes conducían excavadoras para crear cortafuegos- se habían quemado más de 1,400 acres, que se suman a las decenas de miles en todo el estado desde 2018.
Puede que Hawái esté agraciado con bosques tropicales, lo que hace que algunas partes de las islas sean algunos de los lugares más húmedos del planeta, pero también es cada vez más vulnerable a los incendios forestales. Las lluvias intensas favorecen el crecimiento desenfrenado de especies invasoras, como la hierba de guinea, y los veranos secos y calurosos las hacen muy inflamables.