Los demócratas de la Cámara de Representantes de Texas abandonaron el estado el lunes en un esfuerzo por impedir que los republicanos aprueben una nueva ley de voto restrictiva en los 27 días que quedan de la sesión legislativa especial convocada por el gobernador Greg Abbott.
Dos aviones fletados que transportaban a la mayoría de los demócratas que salieron de Texas a Washington, DC, aterrizaron en el aeropuerto el lunes por la noche. Ellos han mantenido en gran medida su planificación en secreto porque pueden ser legalmente obligados a regresar al Capitolio del estado y creían que la aplicación de la ley podría ser enviada para localizarlos.
Su movimiento coloca a Texas en el centro de la lucha nacional sobre el derecho al voto, con los legisladores estatales del GOP convirtiendo las mentiras del ex presidente Donald Trump sobre el fraude electoral generalizado en un impulso para nuevas leyes que limitan el voto por correo, el voto temprano y más.
Ya este año, los estados controlados por los republicanos, incluyendo Florida, Georgia y Iowa, han promulgado nuevas leyes de voto restrictivas. Los demócratas en el Congreso han impulsado medidas que ampliarían el acceso a las urnas en todo el país, pero la oposición del Partido Republicano en el Senado ha impedido que superen el umbral de 60 votos necesario para romper el filibusterismo.
Abbott, el gobernador republicano que busca un tercer mandato en 2022, convocó una sesión legislativa especial de 30 días, diciendo que la “integridad electoral” sería una de sus prioridades.