Cuando dos personas se atraen y se aman se forma una relación amorosa que causa mucha felicidad e ilusión.  Pero, para que esto suceda, los dos deben tener la voluntad de estar juntos.

Las relaciones “prohibidas” pueden ocurrir porque existe vínculos de sangre entre los dos o porque ponemos nuestras ilusiones en una persona que ya está comprometida, etc.

Con el solo hecho de saber que esa relación no puede ser posible, debería ser motivo suficiente para decir basta.

Pero, puede ocurrir que pasa el tiempo y sigues insistiendo y poniendo toda tu atención en un amor que te hace daño o que te ignora. Así que, aquí te dejamos unas preguntas que debes responderte con toda la sinceridad posible para poder saber si tienes un amor imposible:

¿El deseo de formar una pareja y tener una relación amorosa también es el deseo de la otra persona?

Si la respuesta es negativa, estás en una lucha que no existe y te esfuerzas por alcanzar un amor que has idealizado.

¿Qué se debe hacer para que ese amor imposible se vuelva posible?

Piensa muy bien tus respuestas a esta pregunta para ver si se ajustan a la realidad.

¿Dedicas el mismo tiempo y energía a otras actividades?

Piensa en el tiempo que dedicas pensando en esa persona, y evalúa si has dejado a un lado todo lo importante como lo son tus amigos, las actividades que antes disfrutabas y hasta la oportunidad de conseguir un amor verdadero y posible.

¿Te interesas por una relación imposible solo para evitar el sufrimiento?

Aunque te suene extraño, eso sucede y puedes aferrarte a un amor imposible para asegurarte de no sufrir una nueva ruptura.