El mindfulness es una técnica de relajación que trae la mente hacia el presente, para poder disfrutar de las todas cosas, reducir el estrés y vivir en armonía.

Por lo general las personas estamos pensando en el pasado o preocupadas por el futuro, por lo que nos perdemos del presente. El mindfulness ayuda a que seamos más conscientes de lo que somos.

Una gran ventaja del mindfulness es que puede practicarse en cualquier lugar y momento; no requiere que entremos en una meditación profunda y silenciosa.

Aquí, te enseñamos cómo hacerlo:

EL PRESENTE

Primero que todo hay que tener consciencia que el presente es lo más importante en tu vida, ya que es el aquí y el ahora; el pasado ya pasó y no puedes cambiarlo y el futuro es algo incierto. Por lo tanto, no es conveniente gastar tu atención en tiempos que no están contigo, así reduces el estrés quitándote preocupaciones.

Además, debes poner toda la atención en lo que estés haciendo en ese momento presente, ya sea, conducir un auto, caminar, cocinar, tomar una ducha, etc. No permitas que tu mente te impida disfrutar de lo que te rodea por estar pensando en otra cosa.

NO JUZGUES

El mindfulness nos dice que la vida es una serie de acontecimientos aleatorios, así que hay que vivirlos sin tener un estado emocional reactivo. Por ejemplo; te sucede algo que no te gusta, así que simplemente observa, acepta y no juzgues la situación. Esto aplica tanto para las situaciones positivas como negativas. Dejamos que la vivencia llegue a nosotras y cuando sea el momento se deja marchar sin juzgar.

MEDITACIÓN

Sería conveniente que dispongas de media hora al día para ti sola. En ese momento busca un espacio donde puedas desestresarte y armonizarte sin que nada te moleste ni interrumpa.

Colócate en posición de loto, relájate y pon toda tu atención en la respiración. Déjala fluir por todo tu cuerpo mientras tu mente pronuncia un mantra, por ejemplo “Ohm” o frases positivas como “soy una persona feliz y nada me perturba”, etc.