Las madres vacunadas contra el COVID-19 podrían transmitir a sus bebés lactantes la protección contra la infección, según un estudio publicado recientemente por la Universidad de Florida.

Según los investigadores, los anticuerpos transmitidos a través de la leche materna podrían ser beneficiosos para los bebés, pero se necesitan más estudios para determinar su impacto.

El estudio analizó la sangre y la leche materna de 21 madres lactantes antes de la vacunación, después de la primera dosis y tras la segunda. Los investigadores descubrieron que en la leche materna, después de la segunda dosis, había un aumento de 100 veces en los anticuerpos de inmunoglobulina A, dijo Joseph Larkin III, autor principal del estudio.

Los bebés nacen con su sistema inmunitario sin estar completamente desarrollado, dijo Larkin. Son demasiado jóvenes para recibir la vacuna COVID-19 y no pueden protegerse. La leche materna, sin embargo, es como una caja de herramientas útil que puede modificarse para mejorar potencialmente esa vulnerabilidad.