Los últimos meses fueron como una pesadilla para uno de los cantautores más importantes de la escena musical del regional mexicano, tras el ataque armado en el que perdieron la vida su hermano y su familia, durante semanas, Alfredo Olivas tomó la decisión de desaparecer por un tiempo de la escena pública, de las redes sociales, e incluso se especuló se había mudado a otro Estado pues temía por su propia vida en Jalisco, y es que él ya sabe lo que es tener plomo en el cuerpo, su padre estuvo a punto de morir también años atrás y al parecer esto pudo haber sido una advertencia para todos, incluyendo al cantante.
Pero bien dicen que “la música es capaz de curar” y una de las maneras en que un compositor puede sanar heridas es escribiendo y creando, es así que llega un estreno más que esperado para sus fans, es una canción que desde el principio marca una diferencia pues los arreglos fueron mezclados con algunos instrumentos que suele utilizar en su repertorio, por un lado la armónica, por el otro la batería y esto le da un matiz de country.
La temática también es interesante, pues apela a la sinceridad de un hombre que a pesar de tener una amante quiere dejarle las cosas en claro pues no es capaz de amarla ni de comprometerse pues tiene una vida hecha.
Antes de este lanzamiento que se convierte en un “juego de riesgo”, Olivas se había dejado ver solamente a través de una fotografía que él subió a sus cuentas en donde se encuentra en la preciosa ciudad de Paris, posando en un puente donde se ve un bello atardecer en el río Sena y las torres de la Catedral de Notre Dame. Y el mensaje era más que extraño: “Me puedes oir pero no me puedes hablar”… ¿estaría dedicado a alguien en particular, será solo el verso de una de sus canciones o simplemente una frase inspirada por la icónica urbe europea?
Finalmente, su equipo ha comenzado a cerrar algunas fechas, ninguna en la Unión Americana, pues si antes del atentado le había sido casi imposible conseguir una visa de trabajo, será mucho más complejo tras las investigaciones que han puesto a algunos miembros de su familia en posiciones incómodas.
Pero comienza en Saltillo, Coahuila, esperando que el evento pueda llevarse a cabo sin ningún peligro.