Los auxiliares de las residencias de ancianos -los miembros del personal que prestan la mayor parte de los cuidados directos a los residentes- eran los que menos probabilidades tenían de estar completamente vacunados contra el coronavirus a mediados de julio, según un nuevo análisis de los centros estadounidenses.

El estudio subraya la influencia que el nuevo mandato federal del presidente Biden para todos los trabajadores sanitarios puede tener en poblaciones como los ancianos de las residencias de ancianos, que son vulnerables a las infecciones por coronavirus, según los expertos.

Las bajas tasas de vacunación entre los trabajadores de las residencias de ancianos en algunas zonas han alimentado la preocupación por la aparición de nuevos brotes entre el personal y los residentes de estos centros, incluso con un elevado número de residentes vacunados. Las muertes por Covid entre el personal y los residentes de las residencias de ancianos representaban casi un tercio de las víctimas mortales de la pandemia en el país hasta el 1 de junio, y las tasas de vacunación entre el personal rondan el 63%, según los últimos datos federales.