La deportación de los migrantes haitianos es un crudo ejemplo de cómo el presidente Biden ha desplegado algunos de los enfoques más agresivos en materia de inmigración puestos en marcha por el ex presidente Donald J. Trump.
Las imágenes podrían haber salido directamente del libro de jugadas de inmigración del ex presidente Donald J. Trump: agentes de la Patrulla Fronteriza montados acorralando a familias haitianas desesperadas en la frontera suroeste para su rápida deportación de los Estados Unidos.
La portavoz del presidente Biden dijo que las escenas de los agentes a caballo eran “horribles” y no eran “aceptables o apropiadas.” La vicepresidenta Kamala Harris dijo que “los seres humanos nunca deberían ser tratados así”. El Departamento de Seguridad Nacional dijo que estaba investigando.
Aun así, las deportaciones son un claro ejemplo de cómo el señor Biden -que declaró el 2 de febrero que su objetivo era “deshacer la vergüenza moral y nacional de la administración anterior”- está desplegando algunos de los enfoques más agresivos de la inmigración puestos en marcha por el señor Trump en los últimos cuatro años.
